En todas las guerras,
más allá de los que vencen y los que pierden,
lo que queda es una humanidad derrotada.
Ivo Andrić
Este post es un homenaje a un extrañísimo wikipedista, Goldorak, a quien le debemos que cuenca minera de Palencia sea artículo destacado, y de paso, se ocupó del Premio Nobel Ivo Andric.
En fin, que me perdonen si no hilo bien el discurso. Un amiguete está haciendo una intentona de dejar de fumar, y en señal de aprecio he decidido secundarle, aunque sea un trecho del camino, el más difícil, que es el comienzo.
El caso es que me resulta curioso y viene bastante al caso el que Goldorak se haya ocupado de Ivo Andric y también de su novela "Un puente sobre el Drina". En fin, sólo quiero contar cuatro apuntes para interpretar el libro:
* Dentro de la fraseología serbia, "enderezar el Drina" viene a ser sinónimo de llevar las aguas a su cauce enderezando una situación muy difícil, es decir, de normalizar.
* Ivo Andric vivió en una época extraordinariamente difícil, y le fue confiada la embajada del Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos en Berlín, después de una carrera diplomática por varios países europeos, entre ellos el nuestro. Se jactaba de poder leer el quijote en lengua original, y afirmar que Cervantes había sido para él "el escritor que más le había influído.
* De los españoles pensaba que "teníamos otro sentido de la realidad" y que para comprendernos "había que trazar una línea". Entre las cualidades que nos atribuía era nuestra incapacidad para comprender el sentido de la palabra frontera.
* En su obra mas destacada, "Un puente sobre el Drina", se hace un desarrollo histórico de un puente en Vichegrado, el puente Mehmed Paša Sokolović, levantado por el jenízaro de origen Serbio homónimo que llegó a ser Gran Visir del imperio otomano en el Siglo XVI. El puente se convirtió en un punto de encuentro, y es la permanencia de esta metáfora y sus vicisitudes lo que vertebra toda la novela. Es "el símbolo de la unión cuando parece que la convivencia es imposible".
En su libro de recopilaciones filosóficas "Signos al borde del camino", no publicado en castellano hasta donde yo sé, aparece una cita que hago mía:
"En la primera parte de la vida el hombre hace aquello de lo que se arrepentirá y que negará en la segunda. Y la segunda parte la pasará intentando en vano corregir, o por lo menos disimular lo que había hecho en la primera. Así que al final todo vuelve a su punto inicial. Sólo quedan el arrepentimiento y la vergüenza."
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Me temo que Goldorak se interesa por Ivo Andric desde una perspectiva muy diferente a la mía. En su página de usuario dice viajar cuanto puede "para curar el nacionalismo" y en no creer en el carácter de nación de los Països Catalans.
Yo también he viajado mucho, entre otros lugares, por los que se narran en la novela de los puentes del Drina. Ahora bien, no intento curarme nada con ello. Crecer, si. Relativizar, posiblemente. Pero no intento curarme nada. El problema es parecido a intentar curar la homosexualidad de los demás: si se convierte en una obsesión, lo más probable es que en realidad la "padezcas".
No hay nada que curar en el nacionalismo. Yo mismo soy un orgulloso nacionalista castellano. Lo que hay que curar es aquellas almas que pretenden crear división bajo cualquier pretexto, ya sea el nacionalismo, el antinacionalismo, la religión o el anticlericalismo.
Andric buscó los puentes, no la disolución de la pluralidad Bosnia. El problema es que si lo haces, no te entiende nadie.
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