Rafa: gracias por hacerte mi seguidor. Parece que nuestro amigo "Pol Pot" se ha hecho seguidor del blog equivocado. Es equivocado porque por H o por B, acaba ocurriendo algo que hace imposible desembarazarme de este en el que estoy escribiendo.
Este todavía no es el post en el que me puedes contestar. Simplemente he sacado mi portatil en el mítico Café Vienne, en el que creo que me van a arrancar el alma cuando pida la cuenta. Y lo he hecho porque, tras momentos de reflexión y conversación, he vuelto a notar lo vomitivamente paleto que es nuestro país. Nuestro paisaje y nuestro paisanaje. Tengo muchas, muchas ganas de huír.
Supongo que ahora, desde Londres, lo verás mas claramente. Podemos cruzarnos impresiones públicas y madurar mejor esa idea veraniega de Ateos-librepensadores.
El lunes por la noche maduro la cosa.
Nota grosera: Si... quédate tranquilo, llevo la muda limpia y la "chorrina" lavada con lejía. XDDDDDD
Tos galenos higienistas...
Nota por incompatibilidad para "Pol Pot": Es Rafa S, no Rafa O"
Otra nota: ¡¡¡Aaaaargggg!!! Rafa, por dios... son unos herejes, aaaaargggg. ¡¡¡Emplean PBworks para sus wikis!! Aaaarggg... me siento suuuucioooo. Aaaaargggg. Me voy a pillar un cercanías ¡woarffff qué asssscooo!
sábado, octubre 10, 2009
Pero qué sórdidamente paletos que somos
Publicado por Gustavocarra en 4:11 p. m. 0 comentarios
Etiquetas: preaviso
lunes, octubre 05, 2009
Todo cambia: pero yo hubiera cambiado mi vida por la de Mercedes.
Cambia el sentir un amante
Cambia el rumbo el caminante
Aunque esto le cause daño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño
Pero...
Hoy toca desazón y llantina. Los que saben qué significa Argentina para mi comprenderán que hoy estoy absolutamente desconsolado.
Dios mío.
Fue tan enormemente duro ver tu personalidad resquebrajada... Ver que ya no había en ti nada de humano...
Es duro, pipita, saber que no vas a leer esto. Y en el caso de que lo leyeras, ni siquiera lo entenderías. No pasa ni un día sin que mi corazón se vaya al piso. Ni uno.
Está bien... no me enamoré de ti, tesoro. Pero jamás podré olvidar tu inmensa capacidad de generar ternura. Me duele tanto que de ti sólo quede una carcasa andante...
Pipita, sólo te pido que me sueltes de una vez. Que por fin pueda ver que estás segura, y no cómo estas.
Queridos amigos: sabed que el peor horror que existe, es interpretar un papel en una película, y ver que el argumento se te haga realidad en tu vida. La mía fue plenilunio.
En mala hora te dije aquello de "Tú, si quieres, me abandonas. Pero Argentina no". En mala hora, mi pipita, mi tierna...
Todo, maldita sea, todo, todo cambia.
Menos mi dolor.
Postcriptum: Vaya, me he fijado en el vídeo que acompaña este post. Uff... qué emoción ver el riachuelo desde la ventanilla del avión... tantas veces... Me muero de ganas de volver. Y ahora... en fin, he parado de escribir de la emoción.
Y ahora, con la frente marchita y la sien plateada. Me brotan lágrimas...
Publicado por Gustavocarra en 3:47 p. m. 0 comentarios
Etiquetas: El libro de las mutaciones
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