.letrag { float:left; color: #fe6700; font-size:100px; font-family:none; line-height:80px; padding-top:1px; padding-right:5px; }

Cinco años de Don Quijote

Este blog, como su nombre indica, es el registro de un periplo personal, una bitácora.

Hace cinco años comencé una etapa diferente en mi vida, y me planteé llevar un registro. Precisamente porque se trata de un camino, todas las opiniones que vierto son provisionales, un intento de comprender y recapitular. También es un experimento literario. Algunas de las personas a las que me refiero son reales. Otras son en realidad una mezcla de referentes, de varias personas distintas que me permiten crear un arquetipo con el que dialogar. Es un poco como Pirandello y Unamuno.

Con ese velo puedo reconstruir mis momentos emocionales, aquello que me ha inspirado y preocupado durante estos cinco años y ponerlos en perspectiva. Creo que ha sido una experiencia muy bella, y la dejo aquí para disfrute de todos.

Hasta siempre.


sábado, mayo 17, 2008

Lo que este blog no es ni será



Este blog no trata ni tratará de temas de interés general. No trata de divulgar mis intereses musicales: pongo música como podría poner una imagen, con el mero propósito de ilustrar. No trata de escalar posiciones en menéame ni ser muy leido. No trata de establecer verdades permanentes. No lleva una línea argumental fija, aunque si un cierto estilo. Nada de lo que hay en el es una opinión inamovible. No pretende demoler con argumentaciones. No pretende ayudar a nadie, pero me gusta compartir las píldoras emocionales que dejo con personas en situaciones semejantes. Nunca reflejará mis actividades y opiniones como wikipedista. No quiero hacer gran literatura. No quiero seducir. Si algo de lo que aquí digo hace pensar que sugiero otra cosa que no sea mi inquebrantable amor hacia todas las manifestaciones de lo humano, hacia su inherente dignidad, entonces ha sido malinterpretado. Sólo se trata de sentarme solo y dejarme embrujar por ese misterio. Sólo se trata de afirmar que la vida, que este instante, que cada instante es un milagro. Y libar apresurado del néctar de la añoranza en tanto recibo nuevos vientos. Y me quedo con todo y lleno la maleta de pegatinas de los mundos visitados. Casi estoy terminando la treintena y soy un joven hidalgo, he leído mucho y peleado contra muchos espejismos. Dicen que el apellido determina... debe ser eso.