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Cinco años de Don Quijote

Este blog, como su nombre indica, es el registro de un periplo personal, una bitácora.

Hace cinco años comencé una etapa diferente en mi vida, y me planteé llevar un registro. Precisamente porque se trata de un camino, todas las opiniones que vierto son provisionales, un intento de comprender y recapitular. También es un experimento literario. Algunas de las personas a las que me refiero son reales. Otras son en realidad una mezcla de referentes, de varias personas distintas que me permiten crear un arquetipo con el que dialogar. Es un poco como Pirandello y Unamuno.

Con ese velo puedo reconstruir mis momentos emocionales, aquello que me ha inspirado y preocupado durante estos cinco años y ponerlos en perspectiva. Creo que ha sido una experiencia muy bella, y la dejo aquí para disfrute de todos.

Hasta siempre.


jueves, enero 28, 2010

Intuiciones



Corte histológico de hipocampo de conejillo de indias en el que se ensaya la tirosín hidrolasa a las 8 semanas de vida. Se presentan dos casos, un control y otro sometido a estrés prenatal.


Pablo porras lo detectó muy bien: yo estaba en crisis. Icluso se evidenciaba con algunos desequilibrios de los que era bien consciente. Lo aceptaba, porque sabía que tras ello estaba la respuesta a una larga búsqueda.

Sé que desde fuera no se comprende, que mucha gente no me ha entendido, pero yo sólo me entiendo. Alguien observó no hace demasiado de mi, mientras comíamos una porción de pizza, que tal vez lo que sucedía es que si juntamos amplitud de campos y una gran memoria, lo que sucede es que veo un mayor número de lazos y relacciones entre las cosas. Es cierto, lo veo y lo hago a gran velocidad. En realidad mi experiencia es parecida a encontrar a Wally nada más abrir la página. No hay un lapso de tiempo: lo veo, y luego me doy cuenta de porqué. Esto genera un problema de comunicación: explicarme no es sencillo, puesto que la mayoría de la gente no tiene este tipo de experiencia cognitiva.

Tanto mi edad, como mi ausencia de antecedentes, pero especialmente mi constitución bioquímica me van a proteger de una determinada afección. Sin embargo, desde hace tiempo medito en el porqué de su extraño perfil genético, y conjeturo con que confiere algunas ventajas a los familiares no afectados que compensa mucho los riesgos.

Pero más allá de eso está su textura cognitiva y la personalidad que emana de ella. Es increíble. He tenido o me interesado por dos tipos de pareja: las que tenían una gran afectividad, pero me inhibían completamente la libido, y los que tenían una aparente anhedonia, y despertaban ferozmente mi libido. Y ahora sé que esa anhedonia, esa aparente frialdad que se les atribuía es en realidad aparente, pues existen estudios científicos que lo demuestran.

Hay una cosa más. En aquellas personas en las que existe susceptibilidad, y por tanto riesgo de aparición, siempre parece como si fuera en realidad a aparecer de un momento a otro. Hay, por una parte, una conciencia de inminencia, y por otra parte un exceso de vigilancia sobre el riesgo.

No puedo evitar sentirme perdidamente atraído por este perfil, aunque estoy superando este complejo de Casandra. Pero explicarlo es una forma de explicarme. Hoy he quedado con una persona afectada, y como siempre, me llevo de maravilla. Y es todo un placer para mi :)

5 comentarios:

Igor21 dijo...

Siempre litio, nada de electroshocks que está muy pasado de moda y se gasta mucha corriente.

Por cierto que en español-RAE-Fetén, no se llaman cerdos de Guinea sino conejos de Indias aunque a los pobres de la foto bien poco les importará como los llames.

Gustavocarra dijo...

Hay, el carbonato de litio... frío, frío. No es BD, aunque genéticamente está muy relacionado. Es un fallo de dominancia hemisférica. Ya está corregido lo de Guinea pig, no me acordaba. Y si, sacarle el hipocampo a un bicho, aunque es una intervención a la que se puede sobrevivir produce... mmmm ¿cómo se llama? Vaya, no me acuerdo...

Gustavocarra dijo...

En realidad podría considerarse una afasia del lóbulo temporal.

Igor21 dijo...

Pues me arrepiento de haber lo dicho porque ahora creo que es "Guinea pigs" pronunciado "cerdos guineanos". "Conejos de Indias" es un localismo peninsular racista ya que al final no eran las Indias sino un nuevo continente y después de tantos siglos seguirse empedinando con lo de las Indias no hay derecho.

Gustavocarra dijo...

Sea como sea, este bicho, por lo demás muy similar a una rata, está condenado a llevar un nombre referente a nuestra ominosa historia colonial unido al de un animal al que no se parece ni por asomo.

Como alternativa, propongo llevar esta tendencia tan lejos como sea posible y llamarle en lo sucesivo "costrollo rifeño".