El ganador del Premio Goncourt 2010 Michelle Houellebecq. La autoría y licencia pueden consultarse aquí.
Estoy sorprendido por este nuevo premio Goncourt. No me identifico con muchas de las ideas del autor, pero le admito dos cosas: un dominio inusual de la estructura narrativa y una independencia a prueba de bomba (nunca mejor dicho). Por ello he aprovechado para darle un repasito a su libro "partículas elementales", dado que toca una temática que realmente me interesa. El artículo no está en la wikipedia en español y puede que me anime a hacerlo :)
Para aquellos que tienen la costumbre de valerse de mis post para elaborar diagnósticos de trastornos, complejos, o abuso de sustancias, me voy a complacer en darles carnaza de la buena: Realmente me siento como un híbrido de los dos protagonistas medio hermanos del libro, Bruno y Michel (Biólogo molecular, como un servidor). Mi vida sería una extrañísima mezcla de ambos. Y por otra parte, si el resultado (de máximos) de mis investigaciones culminara con el éxito, una de las cosas que debería plantearse la humanidad es el cese de la reproducción: puesto que la reproducción tiene como finalidad la perpetuación de la especie, la ausencia de envejecimiento ya cumpliría esa misión.
No deja de ser curioso el tratamiento del vacío existencial en toda la obra. No he visto nada similar, ni siquiera en Kundera. Pero si que hace tiempo hubo un libro (que me recomendó, cómo no, Javi del Burgo) que me resultó extrañamente similar: La soledad de los números primos, de Paolo Giordano. Esta vez si que hice el artículo en wikipedia, pero fue por despecho: por entonces a alguien, que se empeñaba en compararme con Tirithel, tuve que devolvérsela con una comparación más humillante, a ver si así comprendía de una vez que hacer eso es muy feo.
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La estrategia del avestruz es la peor opción de entre las posibles. En "Partículas elementales" Houellebecq no libra ni a cristo de su correspondiente paliza dialéctica. El resultado es un enorme pesimismo cultural, porque llegado a un punto, todo parece entrar en la misma dinámica: wikipedia y la iglesia.
Mis palos para todos son valientes. Ser libre e independiente es una tarea muy arriesgada, que se lo pregunten a Hipatia. Pero tenemos una sola vida y hay que verla con los ojos bien abiertos: Ensada: no es un troleo, no es una farsa. Hay demasiada gente. Es un conflicto, y se debe abordar ese conflicto, digan lo que digan, y se pongan como se pongan.
Me niego a ver las cosas desde el lado facil. Y tenéis suerte: a diferencia de Houellebecq, mis palos y acusaciones de hipocresía y cinismo no conllevan pesimismo cultural, pero lo que menos conllevan, es odio.
Los conflictos son superables, nos ayudan a crecer, a comprender y a mejorar. Lo que de ninguna manera ayuda, es la estrategia del avestruz.
Lástima que a Houellebecq le paguen por abrir los ojos y a mi no. Debe ser que no tengo suficiente odio.
jueves, noviembre 11, 2010
La estrategia del avestruz y Houellebecq
Publicado por Gustavocarra en 4:23 p. m.
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4 comentarios:
Borges ya describió la deprimente perrspectiva de ina inmortalidad que consistiera en la simple duración indefinida: hastío , indiferencia, la dolorasa lucidez de saber que ya nada nos sorprenderá. Para sus inmortales nada más deseable entonces que la liberadora muerte. Llegado el caso habría que pedirle a la ciencia que inventara algo bueno para librarnos de la vida. Y hay que reconocer que eso puede dársele bien.
Si... jejeje. Lo de dedicarme a la investigación del envejecimiento es en realidad pura misantropía.
Aunque también nos aportaría libertad, si lo miras desde otro lado: tendríamos la posibilidad de controlar algo más de nosotros mismos.
Aunque, conociendo a las farmacéuticas, creo que encontrarían una pastilla para el hastío, para la indiferencia, y contra la lucidez ya hay muchos remedios caseros. Yo soy adicto a uno, mal que me pese.
En cuanto al hastío... por ahora me funciona bien Vetusta Morla.
Un abrazote, Pablo :)
Otro problema médico de una supuesta inmortalidad indefinida es que los pabellones auriculares nunca dejan de crecer.
Si... crecimiento vs senescencia es todo un misterio.
Ya hablaremos del crecimiento de las orejas... En cuanto a la ausencia de senescencia en el pabellón auricular...
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