Acepto mi destino. Intentaré moverme dentro de él, aprovechar sus bondades. Aceptar lo que soy, por defecto y por elevación.
Cuidarme un poco.
No se si será buena o mala idea también lo de que te vengas a vivir conmigo, tati. Habrá que hablarlo y planearlo con cuidado.
Tal vez sea lo mejor.
En fin: acepto mi destino: Los dioses pueden descansar. Y dejarme en paz.
jueves, noviembre 26, 2009
No hibris
Publicado por Gustavocarra en 7:00 p. m.
Etiquetas: brindando juntos, Con vivos, muertos
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